jueves, 25 de julio de 2013

Dia de luto en Galicia



Despues del terrible accidente ferroviario sucedido en el dia de ayer y que ha bañado de dolor y muerte nuestra comunidad autonoma  poco podemos hacer desde aqui excepto dar nuestro pesame y apoyo a los familiares de los heridos y fallecidos. Pedir tambien una mayor concienciación a la hora de hacerse donante de sangre, muy necesaria en estos momentos pero tambien durante todo el año y que en Galicia nos llevan avisando desdde hace unas semanas de cierta excasez en las reservas, y en este reproche  me incluyo que siempre esquivo el camión movil de transfusiónes cuando lo veo sea por una u otra razón.

Asi que ya sabeis la vida se acaba de un momento para otro repentinamente y sin aviso, disfrutarla todo lo posible, vivid con emoción ya sean las partidas de rol con los amigos o las tardes en casa con la familia que como decia cierto Nexus 6 en Blade Runner: ""Yo... he visto cosas que vosotros no creeríais: Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto rayos C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán... en el tiempo... como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir"

lunes, 22 de julio de 2013

Ilustrando la Fantasia: Erol Otus

Asi como Larry Elmore, mi referente como ilustrador en el D&D, me llamaba la atención por su tipo de ilustración de linea clara, sus personajes de aspecto heroico con poses rotundas y sus dragones y más dragones, habia otro ilustrador que tambien me llamaba mucho la atención pero mas bien por todo lo contrario: formas extrañas incluso feas, monstruos abotargargados de grandes ojos, tentaculos y apendices de todos los tipos, tamaños y colores. Y tengo que admitir que las primeras ilustraciones que vi de este hombre, Erol Otus averigue mas tarde que se llamaba, no me entraban ni a tiros. Pero desde hace un par de años esa impresión acerca de su trabajo ha ido cambiando, principalmente porque gracias al descubrimiento del movimiento OSR he ido investigando y "recopilando" material de los primeros tiempos del D&D y he podido comprobar como este ilustrador es uno de los que crearon el imaginario de este juego en sus inicios, y ademas creo que era perfecto para representar esa sensación de extrañeza,  de que podias encontrar cualquier cosa, que impregnaba las primeras aventuras del primero de los juegos de rol. (Weird segun Michael Curtis es su Dungeon Alphabet). Asi entre sus trabajos estan las portadas y parte del arte interior del Basic y Expert D&D de 1981, asi como varias de las aventuras mas miticas como los modulos A4 "In the Dungeons of the Slave Lords", D3 "Vault of the Drow", S4 "The Lost Caverns of Tsojcanth", B2 The Keep on the Borderlands entre otros. Y ademas hoy en dia sigue en activo ilustrando muchos de los modulos del Dungeon Crawl Classics, uno de los juegos que intentan capturar parte del espiritu de aquella epoca.


 
 
X3 Castle Amber




Grupo de "heroes" del DCC



Portada del Hack Master homenajeando la del D&D de 1981



Y como no un par de enlaces: Minipainting  y  The Erol Otus Shrine

miércoles, 10 de julio de 2013

Nacido de hombre y mujer de Richard Matheson




X — Este día había luz y madre me llamó asco. Eres un asco dijo ella. Vi en sus ojos el enfado. Me pregunto qué es un asco.
Este día había agua cayendo de arriba. Caía por todas partes. Yo lo vi. La tierra de la parte trasera que yo observaba desde la ventanita. La tierra chupaba el agua como labios sedientos. Bebió demasiado y se puso mala y movediza y marrón. No me gustó.
Yo sé que madre es una bonita. Donde está mi cama con paredes frías alrededor tengo un papel que estaba en el horno. El papel dice ESTRELLAS DE LA PANTALLA. En las fotos veo caras como las de madre y padre. Padre dice que son bonitas. Lo dijo una vez.
Y dijo que también madre. Madre tan bonita y yo muy aceptable. Dijo fíjate y ya no tenía la cara bonita. Toqué su brazo y dije todo va bien padre. Tembló y se apartó para que no pudiera tocarle más.
Hoy madre me soltó la cadena un rato y pude mirar por la ventanita. Por eso vi el agua que caía de arriba.

XX — Este día habría brillo arriba. Cuando lo miré me dolieron los ojos. Después de mirarlo el sótano está rojo.
Creo que esto era iglesia. Ellos se van de arriba. La gran máquina se los traga y se va y ya no está. En la parte trasera está la pequeña madre. Es más pequeña que yo. Yo soy grande. Es un secreto pero he arrancado la cadena de la pared. Puedo mirar por la ventanita todo lo que quiero.
Este día se hizo oscuro. Ya había tomado la comida y algunos bichos. Oigo risas arriba. Quiero saber por qué son las risas. He quitado la cadena de la pared y la enrollo en mi cuerpo. He pisado barro hasta llegar a las escaleras. Hacen ruido cuando ando encima de ellas. Mis piernas resbalan porque yo no ando por escaleras. Mis pies se agarran a la madera.
He subido y abierto una puerta. Era un lugar blanco. Como las joyas blancas que caen de arriba algunas veces. He entrado sin hacer ruido. Oigo mejor la risa. Voy hacia el sonido y miro a la gente. Más gente de la que yo pensaba. He pensado que debería reírme con ellos.
Madre salió y empujó la puerta. Me ha dado y me duele. He caído a un suelo muy liso y la cadena hace ruido. He gritado. Ella ha hecho un ruido como si silbara y se ha tapado la boca con la mano. Tiene los ojos muy abiertos.
Me miró. Oigo a padre gritar. Qué cayó gritaba. Ella dijo una barra de hierro. Ayúdame a levantarla dijo madre. El vino y dijo que si eso era tan pesado. Me vio y se puso muy tieso. El enfado .lo tenía en los ojos. Me pegó.
Manché el suelo con el barro de un brazo. No era bonito. El suelo quedaba de un verde muy feo.
Padre me dijo que fuera al sótano. Tuve que irme. La luz me hacía daño a los ojos. No es como la del sótano.
Padre ató mis brazos y piernas. Me pone en mi cama. Oigo risa arriba mientras me estoy quieto mirando una araña negra que camina encima de mí. Pensé lo que padre había dicho. Ohdios dijo. Y sólo ocho.
 
XXX. — Este día aún era oscuro y padre puso la cadena otra vez. Quiero arrancarla de nuevo. El dijo que yo era malo por ir arriba. Dijo nunca lo vuelvas a hacer o te daré una paliza. Eso duele mucho.
Estoy dolorido. He dormido todo el día con la cabeza pegada a la pared fría. He pensado en el lugar blanco que hay arriba.

XXXX — He soltado la cadena de la pared. Madre estaba arriba. Oí risitas muy altas. Miré por la ventana. Vi alguna gente como la pequeña madre y también pequeños padres. Son bonitos.
Hacían ruidos agradables y saltaban en la tierra. Sus piernas se movían mucho. Son como madre y padre. Madre dice que toda la gente honrada se parece a ellos.
Uno de los pequeños padres me vio. Señaló la ventana. Me aparté y me escondí pegado a la pared. Estaba muy oscuro. Me encogí para que no me vieran. Por la ventana oí sus voces y pies corriendo. Arriba oí el golpe de una puerta. Oí a la pequeña madre gritando arriba. Oí pasos muy fuertes y corrí a mi cama. Puse la cadena en la pared y me tumbé.
Oí a madre bajar. Has estado en la ventana dijo. Oí su enfado. No te acerques a la ventana. Has vuelto a arrancar la cadena.
Ella cogió el bastón y me pegó. No grité. No puedo hacerlo. Pero las gotas cayeron por toda la cama. Ella lo vio y se fue e hizo un ruido. Ohdiosmío diosmío ella dijo. Por qué me has hecho esto. Oí el bastón rebotar en la piedra del suelo. Ella corrió arriba. Me dormí.

XXXXX — Este día había agua otra vez. Cuando madre estaba arriba oí a la pequeña bajar poco a poco las escaleras. Me escondí en la carbonera porque madre se enfada si la pequeña madre me ve.
Ella llevaba una pequeña cosa viva. Corría por los brazos y tenía orejas puntiagudas. Ella le decía cosas.
Todo iba bien pero la cosa viva me olió. Se subió encima del carbón y me miró. Los pelos se le levantaron. Hizo un ruido de enfado con el cuello. Gruñí pero me saltó encima.
No quería hacerle daño. Tuve miedo porque me mordió más fuerte que la rata. Me quejé y la pequeña madre gritó. Cogí con mucha fuerza a la cosa viva. Hizo ruidos que yo no había oído nunca. Apreté más. Todo el carbón quedó lleno de gotas rojas.
Me oculté allí cuando madre llamó. Tenía miedo del bastón. Se fue. Me arrastré por el carbón con la cosa. La puse bajo mi almohada y me eché encima. Volví a poner la cadena en la pared.

X —Todo ha cambiado. Padre puso la cadena muy fuerte. Me pegó y me duele mucho. Esta vez le quité el bastón de las manos e hice ruido. Se marchó y tenía la cara muy blanca. Se apartó de mi cama y cerró la puerta con llave.
No estoy muy contento. Aquí hace frío todo el día. La cadena se va despegando poco a poco de la pared. Y estoy muy enfadado con madre y padre. Y se lo demostraré. Haré lo que ya hice una vez.
Chillaré y me reiré muy fuerte. Mancharé las paredes. Me pondré cabeza abajo y reiré y lo pondré todo verde con mis piernas hasta que se arrepientan de haberme tratado tan mal.
Y si intentan pegarme otra vez les haré daño. Lo haré.

viernes, 5 de julio de 2013

El tambien es Leyenda: Richard Burton Matheson (1926 - 2013)






Se nos ha ido uno de los grandes y desde aquí quiero dejar un recuerdo/homenaje para el escritor de la segunda mejor novela de vampiros de todos los tiempos: Soy Leyenda (la primera, claro, es Dracula de Bram Stoker), además también es el autor de  otras novelas como El Hombre Menguante, El Ultimo Escalón, Mas alla de los Sueños,  y de muchas otras novelas y cuentos cortos. Muchas de estas obras después han sido llevadas al cine o a la televisión con más o menos éxito. Y probablemente las mejores son aquellas en las que el mismo participo como guionista, como en su etapa de éxito en La Dimensión Desconocida.  Una serie de ciencia ficción y/o terror que influiría en toda una generación de escritores y directores como Steven Spielberg, Joe Dante, Robert Zemeckis, Stephen King, y otros mas actuales como Richard Kelly y M. Night Shyamalan entre otros.

Un pequeño fragmento de Soy Leyenda para que podais ver cual es el ambiente de la novela:


"Se sentó, malhumorado, en un taburete junto al vertedero y sacó un cuchillo. Primero, fue separando los pequeños dientes rosados entre sí, luego los cortó por la mitad. El acre y penetrante olor inundó la cocina. Puso en funcionamiento el acondicionador de aire y atmósfera quedó bastante limpia. Luego, con un punzón, practicó un agujero en cada mitad de diente y las atravesó con un alambre hasta formar unos veinticinco collares. En un principio colgaba estos collares en los  cristales, pero la pedrea le había obligado a tapar todos los cristales con madera terciada. Finalmente había sustituido estas maderas por tablones, con lo que la casa se había convertido en un lúgubre sepulcro; pero había puesto fin a aquella lluvia de piedras y vidrios rotos que entraba todas las noches en las habitaciones. Y una vez instalados los tres acondicionadores de aire, se pudo respirar mejor. Un hombre puede acostumbrarse a todo.



Cuando tuvo terminados los collares, salió y los clavó en los tablones de las ventanas, y retiró luego los viejos porque ya habían perdido casi todo el olor.

Realizaba este trabajo dos veces por semana. No había otra forma de defenderse mejor que ésta, por el momento. 


¿Defenderse?, pensaba a menudo. ¿Para qué? Durante la tarde pasó el rato haciendo estacas. Con la ayuda del torno reducía los tarugos de madera a estacas de veinte centímetros. Luego les afilaba la punta en la piedra de esmeril. Era un trabajo agobiante y monótono, y el aserrín flotaba en el aire con su tibio olor y le penetraba los poros y los pulmones, y le provocaba la tos.


Pero las estacas nunca alcanzaban, independientemente de las que hiciese. Y los tarugos escaseaban cada vez más. Pronto tendría que usar tablas. Pensó, irritado, que eso sería el colmo. Todo era demasiado deprimente y debía pensar en cambiarlo. ¿Pero cómo, si no podía dedicar ni un minuto a pensar? Mientras torneaba, el altavoz del dormitorio dejaba llegar el sonido de la Tercera, la Séptima y la Novena de Beethoven. Con la música llenaba el terrible vacío del tiempo. A partir de las cuatro de la tarde empezó a contemplar el reloj de pared. Trabajaba en silencio, con los labios apretando el cigarrillo, los ojos clavados en el taladro que mordía la madera sembrando el suelo de un polvo blanquecino.



Las cuatro y cuarto. Las cuatro  y media. Las cinco menos cuarto. Sólo faltaba una hora y los  asquerosos bastardos rodearían la casa. Tan pronto como se pusiera el sol, aparecerían."

Ademas tambien os dejo unos cuantosarticulos y reseñas: La espada en la tinta , La Fraternidad de Babel,   El Emperador de los Helados, 

Un par de articulos acerca de  The Twilight Zone: 1, 2 , 3

Un episodio guionizado por el: Pesadilla a 20000 pies